Déjalo ser,
no le obligues a ser otra cosa más que lo que hay en su
corazón
aunque a veces te dé miedo verlo oscuro.
Déjalo ser,
él mismo aprenderá a que, a veces, un corazón puro también
se equivoca
pero no hay maldad en
su falla ni retórica en su excusa.
Deja que se vaya
Que sabes bien que su amor no se irá
Y por eso, tarde o temprano, volverá a por él.
No hay comentarios:
Publicar un comentario